Herramientas colaborativas para crear modelos óptimos de gestión sanitaria en el ovino
David Ayala Dulanto
Responsable del Departamento de Software del Centro Tecnológico de Miranda de Ebro
30/11/2020La tecnología
Es vital dar el paso en el mundo de la ganadería. En el sector industrial ya se ha hecho y las empresas que se han quedado atrás lo están notando. Los que dieron el paso de la digitalización, y posteriormente aplicar servicios de industria 4.0, han logrado un mejor posicionamiento, incluso en esta crisis actual, que los que no han aplicado esa tecnología. Esa filosofía debe aplicarse en el mundo ganadero. Todos los actores involucrados (ganaderos, veterinarios, empresas) deben dar un fuerte impulso para intentar ir aplicando técnicas de digitalización en el mundo agroganadero.
La oveja perfecta: recopilar datos
Para una empresa de tecnología, una oveja puede considerarse simplemente como un metro cúbico de lana con un número, ya que el conocimiento sobre las ovejas está en los ganaderos, los veterinarios, las empresas… Podríamos decir que ese metro cúbico de lana con un número genera datos y consume datos. Estos datos se pueden recopilar de las bases de datos existentes en las empresas, ganaderías, etc que ya están puestas en marcha, del conocimiento personal que está sin digitalizar, de la sensórica que puede controlar movimientos o temperaturas…
La recopilación de datos se realiza porque ha surgido una necesidad que se debe cubrir, un problema que existe en la ganadería. La empresa de inteligencia artificial debe intentar detectar los problemas y saber que datos se van a necesitar para resolver ese problema. Por lo tanto, se intenta aportar soluciones a problemas reales, a través de la recogida de datos y un procesamiento automático.
Los datos llegan de una multitud de fuentes: producción lechera, estadísticas (precios, exportaciones), consumos, información diaria, características (raza, edad), sensórica (temperatura, ventilación), históricos, otras fuentes… Además, debe tenerse en cuenta que ese metro cúbico de lana tiene una relación con el tiempo. No es lo mismo un animal recién nacido que cuando es adulta. A partir de esa oveja virtual se comienza a trabajar.
Modelos de oveja virtual
Mi granja virtual
En la granja virtual, además de los ganaderos, deben colaborar también fabricantes de productos sanitarios, laboratorios, proveedores, veterinarios, la captura de datos externa…
Todos estos modelos deben ser comparados con la ganadería real.
Aplicaciones en la gestión sanitaria
Se podrá contrastar la información que dan los sistemas con la base de datos real y con el histórico. Se puede realizar una mejor planificación, por ejemplo, de los partos.
También es importante el análisis de comportamientos y de imágenes. Se trata de una tecnología que ya existe, que no es ciencia ficción, y que, además, es económica.
Todo este proceso lleva a una mejora continua de las explotaciones, ya que lo ideal es comenzar a trabajar con pequeños aspectos para ir ampliando progresivamente a nuevos servicios, una vez que se observe que hay resultados positivos.
La salud de la granja es la suma de la salud de todas las partes.
La importancia de la colaboración
Aplicación al usuario
El usuario al final tiene una herramienta sencilla, que es una aplicación en un móvil, con formularios en los que se deben introducir datos. La herramienta aporta soluciones a través de la inteligencia artificial.
El Centro Tecnológico de Miranda de Ebro, con la colaboración del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl), la Red de Innovación Rural, el Instituto para la Competitividad Empresarial y la Junta de Castilla y León, está intentando desarrollar estas aplicaciones a través de proyectos europeos para ofrecérselas de forma gratuita a los ganaderos.
Crear estas grandes plataformas de datos es un impulso vital para que las ganaderías sean competitivas.